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Una edición con más espacio, más oficios, más ideas por Marina Malfé y Fernando Marín

Este año, FERIAL se agrandó. Y no hablamos solo de metros cuadrados: creció en diversidad, en profundidad y en vínculos. Gracias al acompañamiento del programa Orillas Nuevas —impulsado por el Instituto Francés, la Fundación Williams y Medifé— y a nuestra colaboración con Cooperativa Espacial, pudimos ampliar horizontes, mirar el proyecto desde nuevos ángulos y proyectar su futuro con herramientas renovadas.

Lanzamos la convocatoria 2025 un mes antes que en 2024, y ya algo se sentía distinto. Los resultados fueron contundentes: más de 350 proyectos de toda Latinoamérica se postularon, un 50% más que el año anterior. La comunidad del libro, del arte y de los oficios late con fuerza, y FERIAL se consolida como un punto de encuentro clave no solo en Argentina, sino en toda la región.

En superficie también crecimos: sumamos 400 m2 a los 1000 m2 del año pasado, y pasamos de 160 a casi 180 expositores, con capacidad colmada y una demanda en constante crecimiento. Pero más allá de los números, lo que celebramos es la calidad humana de los vínculos que se tejen en esta segunda edición.

Pensar el espacio desde la colaboración

Una de las claves del salto cualitativo de este año fue el trabajo conjunto con Cooperativa Espacial, uno de los 31 proyectos seleccionados en ON. Junto a elles repensamos el recorrido, la navegación, la señalética y la experiencia integral del visitante. Su mirada sensible y crítica nos permitió articular mejor la multiplicidad de lenguajes que habitan FERIAL.

En ese mismo espíritu, las mentorías del programa Orillas Nuevas fueron fundamentales:

  • Con Vincent Pousou, abordamos la distribución de los espacios por oficios y cómo el “venue” incide en la forma de habitar y experimentar una feria por parte del público. Su mirada curatorial nos ayudó a afinar decisiones clave como reforzar el hecho de que la feria se desarrolle en el ámbito de la Universidad Nacional de las Artes.
  • Con Roch Deniau, exploramos la experiencia de MADE ANYWHERE (París), una feria con estructuras similares. Su enfoque sobre identidad, recorrido y señalética fue inspirador para repensar nuestros tres pisos, proyectar posibles lazos con ferias europeas y conectar producciones latinoamericanas con europeas.
  • Con Valeria Dulitzky trabajamos en profundidad la identidad visual de FERIAL. Junto a nuestro diseñador Gustavo Ibarra, repensamos tanto la estética de esta edición como su proyección futura, integrando con más fuerza los valores y símbolos de la Universidad Nacional de las Artes y la celebración de los oficios.

Oficios, activaciones e identidad viva

Este año incorporamos seis nuevos oficios al recorrido y presentamos nuevas instalaciones artísticas. Entendemos a Ferial, no solo como una feria, sino como una performance de las Artes del Libro. Además, diseñamos un espacio rotativo de activaciones en vivo: caligrafía, risografía y papel hecho a mano se alternarán por franjas horarias, sumando participación directa del público y acercando los oficios al tiempo presente de forma tangible.

En paralelo, iniciamos la creación del Premio a los 25 mejores libros latinoamericanos, que se anunciará oficialmente durante esta edición. Un paso clave para seguir reconociendo el trabajo editorial independiente y artesanal de nuestra región.

FERIAL como plataforma de acceso y formación

FERIAL es mucho más que una feria: es una plataforma pública y viva, una puerta de entrada para que nuevas generaciones conozcan, se acerquen, estudien y hagan de los oficios del libro su camino profesional.

La feria visibiliza oficios que muchas veces no circulan en los grandes circuitos culturales y demuestra que las artes, el diseño, la edición y la creación de libros pueden ser caminos reales de formación, producción y vida.

Al estar organizada por la Fundación Universidad Nacional de las Artes y la UNA, FERIAL se convierte también en una herramienta educativa, una forma de colaborar con la profesionalización, al aprendizaje colectivo y a la posibilidad de trabajar en lo que nos apasiona.

En ese camino, Orillas Nuevas es mucho más que un apoyo institucional: es una invitación a pensar colectivamente, a profundizar lo que somos y a proyectar lo que podemos ser.

Por Marina Malfé y Fernando Marín.